El Bloqueador Solar y sus Diferentes Presentaciones

Si hay un consejo de belleza que tooodos, mujeres y hombres, deberíamos seguir, es el siguiente: Usa bloqueador diariamente. Porque si lo dicen los dermatólogos, los expertos, las mamás y las abuelitas, debe ser por algo, right?

Todos los días estamos expuestos a los rayos UVA y UVB que irradia el sol sobre la Tierra. Estas radiaciones solares tienen efectos comprobados sobre nuestra piel en el mediano y largo plazos y, de no utilizar protección, las consecuencias incluyen el envejecimiento prematuro, las manchas, los lentigos, las líneas de expresión, brotes de pecas y, en el peor de los casos, cáncer de la piel.

El bloqueador solar, al aplicarse correctamente, funciona como una barrera que nos protege de todo lo anterior. Si se empieza a usar con regularidad a una temprana edad, el bloqueador puede convertirse la “fuente de la juventud” para nuestra piel. Así de importante es esto... pero antes de que corras a ponerte el bloqueador que usas cuando vas a la playa, o el que tiene tu mamá en el baño, es muy importante que sepas que hay varios tipos de bloqueadores para diferentes situaciones y es clave escoger el indicado. Si es algo que vas a usar diariamente, es mejor que te informes un poco al respecto:

Primeramente, hablemos del Factor de Protección Solar (FPS)

Este es el famosísimo número que todos los protectores solares tienen en su empaque. Es el indicador que comunica qué tan difícil va a ser para que los rayos UVB enrojezcan tu piel. Por ejemplo, si el FPS es de 40, eso quiere decir que los rayos UV tardarán 40 veces tiempo para enrojecer tu piel que sin bloqueador. El mínimo FPS recomendado es el de 30 y que sea de “amplio espectro”, lo que significa que protege contra los rayos UVA y UVB por igual.

El Bloqueador Solar y sus Diferentes Presentaciones

Ahora sí, ¿qué tipos de bloqueadores hay?

Las diferentes presentaciones de bloqueadores fueron creadas para la gran variedad de tipos de pieles y sus necesidades. Una piel grasa de 25 años no necesitará las mismas cualidades en su fórmula que una de 18 años con tendencia seca. Así como no es lo mismo usar bloqueador para ir a la playa que para ir a la oficina todos los días. Conoce las diferencias a continuación:

Crema

Este tipo de bloqueadores se recomiendan normalmente para pieles secas, ya que su fórmula muchas veces también busca hidratar, aunque ya hay versiones que no dejan sensación grasosa y hasta cuentan con acabado mate. Hay muchas marcas que ofrecen versiones con color para usarlas como una base de make-up diario.

Crema

Gel

Ideal para pieles mixtas, grasas o con tendencia al acné. También son perfectos para proteger zonas con mucho vello, como el cuero cabelludo. Lo mejor es que brindan una sensación refrescante al momento de aplicarse.

Gel

Aerosol o spray

Estos son perfectos para cuando vas a la playa y te lo aplicas en todo el cuerpo varias veces en el día. También, hay algunas marcas que ofrecen versiones mini, perfectas para retocar tu bloqueador durante el día encima de tu maquillaje.

Polvo

Son una gran opción para quienes se maquillan diariamente, ya que la mayoría tienen una textura ligera y suave. Son compactos y súper prácticos, para llevar contigo a donde vayas.

maquillan diariamente

Cápsulas

Esta es una de las presentaciones más innovadoras de los últimos años, aunque hay quienes piensan que no tienen gran efectividad. Son complementos alimenticios que se supone protegen las células de la luz. En principio, su fórmula ayuda a que toleremos más los rayos solares y se deben tomar antes, durante y después de exponerse al sol. Por lo mismo de que no se sabe qué tan efectivas son estas cápsulas, se recomienda complementarlas con un bloqueador tradicional.

Barra o stick

Esta presentación es muy práctica para usarse alrededor de los ojos. Permite aplicar el producto fácilmente y sin ensuciarte las manos.

 Conclusión

Ahora que ya conoces lo básico acerca de las diferentes presentaciones de bloqueador solar, lo ideal es que empieces a probar los productos que más se acomoden a las necesidades de tu piel, y si tienes la oportunidad de ir con un dermatólogo para que te recomiende alguno, ¡mucho mejor!

Además, algo muy importante que debes saber es que, lo más probable, es que el primer bloqueador que compres no será con el que te quedarás por siempre. Hay que probar varios antes de encontrar el indicado. La recomendación es probar, poner atención en cómo lo sientes y cómo lo recibe tu piel y tener mucha paciencia para llegar al indicado (por eso es recomendable consultar al dermatólogo para ahorrar pasos en este proceso, aunque ni ellos tienen una varita mágica). También ten en cuenta que la piel cambia con el tiempo, y que lo que funcionaba a tus 15 funcionaba, a tus 25, tal vez ya no funcionará el día de hoy.

consultar al dermatólogo

Deja un comentario